La personalización completa de servicios
La cartera de servicios de una empresa es una de las partes más importantes. Es el producto final que vas a ofrecer, y un buen diseño ayudará a los usuarios a encontrar solución a sus necesidades. En una entrada anterior de este blog (estos son mis planes) hablamos sobre la división de los servicios, y que estos debían de estar orientados a las necesidades de las personas. No obstante, debemos de poner un límite.
Libertad completa
[caption id="attachment_169" align="aligncenter" width="1555"] Sistema informatizado en pizzería[/caption]
El otro día, fui a una pizzería y me fijé en que habían colocado unos ordenadores dónde seleccionabas tu pedido y después lo recogías. El sistema era simple: una pantalla táctil con varios menús y una impresora cerca. Había una gran cola, más que cuando no había los ordenadores y se supone que estos tenían que agilizar el proceso.
Cuando fue mi turno, un familiar comenzó a elegir la pizza. Teníamos todos los ingredientes a nuestra disposición, pero no teníamos pizzas predefinidas (barbacoa, carbonara...). Disponíamos de toda la variedad, pero no sabíamos como combinar los ingredientes y esto unido a la cola que estábamos formado hizo que seleccionáramos tres de ellos sin llegar a mirar la carta completa. Además, no solemos ir allí, y como usuarios no sabemos cuáles son las especialidades.
A veces una libertad completa de elegir productos abruma al usuario. Es bueno que este tenga el poder de decir que necesita, pero también debemos de orientar al usuario y formar unos planes definidos. Estos planes, bien estudiados y diseñados, cubrirán las necesidades de casi todas las personas o grupos, y si alguno se escapa, ahí es dónde debemos ser flexibles para modificar algún aspecto, siempre que esto sea posible.